Hoy me molestaron a las nueve de la noche en casa una chavala y un chaval, que llamaron a la puerta del piso, y cuando les abrí, pensando que era algún vecino/a que necesitaba algo, me los encuentro y me dicen que son de una multinacional eléctrica (que no nombraré) y ya no les dejé seguir:

YO: "No atiendo a comerciales".

COMERCIAL: "¿Por qué?".

Y: "Porque no me da la gana". Por no decirle "no tengo que darte explicación alguna".

C: "¿Ha tenido alguna mala experiencia con alguno?"

Y: "No. No me interesa nada de lo que me queráis vender".

C: "No queremos venderle nada...". Y ahí la cagó: Unos comerciales que no venden nada...

No soy una persona violenta y entiendo que se están buscando las habichuelas, pero que aparte de molestarme en casa, que no tengan conciencia de clase (supongo) y aún encima me mientan a la cara e intenten engañarme... No sólo no respetan al prójimo, sino que han asumido la "lógica" capitalista de "joder a quién haga falta para ganar". Me subió una rabia desde la boca del estómago y por la espalda, que me entraban ganas de cortarles el cuello a mordiscos. No sé cómo lo vieron/notaron desde fuera, pero no sé que balbuceé, intentando controlar esa rabia, que me dijeron "muchas gracias, buenas noches" y se fueron a molestar a la vecina de al lado.

Entiendo que los pocos curros que hay para la inmensa mayoría y, especialmente para los/las jóvenes, son un truño del tamaño de Alaska, pero si un/a comercial (cuyo trabajo es vender) me miente a la cara, no me está respetando. Tuvieron suerte que (aún) tengo bastante auto-control, pero no puedo garantizar que el próximo comercial que me diga que no me quiere vender nada salga a la calle rodando por las escaleras. ¬¬