
Vivimos lo de siempre pero en un alto grado de descomposición. Nos falta perspectiva para percibir que nos movemos dentro de una zanja cubierta de ideas corrompidas. Hablamos de democracia pero no sabemos en qué consiste. La idea de democracia de las sociedades occidentales es una fantasía. Peor aún. La acción de los gobiernos deconstruye y pervierte su significado. Nos ofrece una idea deformada y grotesca. La sociedad informada, que delibera, que decide y que actúa, que caracterizaría a una democracia, se suplanta por una sociedad desinformada, entrampada y obediente. Las fuerzas políticas reaccionarias son muy conscientes del riesgo de determinadas formas de relacionarse, más horizontales y colaboradoras. Las persiguen, reprimen y anulan sin ningún tipo de miramiento. La división está hecha. Las que mandan y las que obedecen. Salirse fuera de este marco es arriesgado.
Las salvajes son las otras
EVAnaRkISTO shared this.